Hemos llegado al fin de nuestras prácticas han sido cinco semanas diferentes obviamente al resto del cuerpo, de las que la mayoría, si no somos todos, salimos contentos y deseosos de volver en el segundo cuatrimestre. En el que iremos a destinos distintos y volveremos a sentir todos los nervios de esta vez pero sabiendo ya algo de esta. Por mucho que se piense que vas a estar muy perdido y no vas a acordarte de nada pronto te haces con la rutina del sitio en el que estás, y cuanto más te dejan hacer más quieres hacer y más seguro te sientes.
Para los que aun no habéis pasado por el hospital deciros que la aprovechéis al máximo y aunque al principio no queráis preguntar para hacer cosas o las dudas no os cortéis! Puede que os encontréis con alguna persona que no os quiera explicar la mayoría si que lo harán con mucho gusto y les gustará ver como cada vez sois más independientes.
Y sobre todo, una cosa que me han repetido continuamente estas semanas es que las técnicas, aunque nos cueste aprenderlas, pero lo que siempre hay que mantener es la relación con los pacientes, mirándoles mientras les hablas.
Un día de esta semana vino un señor, la mayoría aunque no me dicen que prefieren que les haga los análisis la enfermera siempre me preguntan por ella, al contrario, este señor pareció encantado. Me contó que ya llevaba muchos años viniendo, 10 años, ni más ni menos. Y que él tenía muchos otros más problemas de salud y que siempre que va a algún servicio y le atiende alguien joven se va más contento, dice que nosotros tenemos esas ganas por hacer cosas. que los que tienen más experiencia por que a veces lo hacen todo con menos cuidado y menos cariño.
Así que, coged con ganas las semanas que estéis en el hospital e ir con seguridad, y ¡disfrutad!
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